A fines de julio de 1965, ILAFA realiza en Santiago de Chile su Congreso anual y por primera vez invita oficialmente a diversas asociaciones de refractoristas latinoamericanos. Concurren a esta invitación socios de ASOFAMAR (Argentina) y ABRAFAR (Brasil) y la Asociación de Cerámica y Vidrio (Chile). Este encuentro posibilitó aunar criterios sobre metas e intenciones comunes a los latinoamericanos que fructificaron, en lo que se llamó Declaración de Santiago que estableció las bases de la formación de ALAFAR. Finalmente el 27 de abril de 1967 se firma el Acta Constitutiva de la Asociación Latinoamericana de Fabricantes de Refractarios.